Varios sectores permanecen en huelga mientras el Gobierno de Manuel Valls asegura que “se hará todo lo necesario” para garantizar los servicios públicos y la actividad económica.
Manifestantes contra la reforma laboral en Francia han atacado este jueves una comisaría de policía en Burdeos y han roto los cristales de varias entidades bancarias en Nantes. 77 personas han sido detenidas en todo el país y según el ministerio del Interior unas150.000 personas se manifestaron en la que constituye la octava jornada de protesta por el nuevo proyecto de Ley del Trabajo del Gobierno Hollande que facilitará el despido.
En Burdeos unas cien personas lanzaron diversos objetos contra una comisaría de policía, causando destrozos en el edificio y daños en uno de los coches policiales. En Nantes causaron destrozos en las ventanas de varios bancos y los manifestantes se enfrentaron a la policía, que respondió con gases lacrimógenos. También se produjeron enfrentamientos en París.
En esta octava jornada sigue la amenaza de escasez de carburantes y de posibles cortes eléctricos, ahora que 16 de las 19 centrales nucleares del país se han sumado a la huelga. Controladores aéreos, ferrocarriles y puertos entre los sectores afectados por los paros.
Los sindicatos han convocado protestas y desfiles en París y otras ciudades del país y varios puertos han amanecido bloqueados por la acción de los manifestantes.
Refinerías y depósitos petroleros se encuentran en el epicentro de los movimientos de protesta desde hace varios días y algunos puentes, como el deTancarville o el de Normandia, cerca de Havre, permanecen cerrados esta mañana, con los consiguientes problemas circulatorios que eso genera.
El paro en las nucleares, que producen más del 75% de la electricidad del país, no ha tenido impacto en la distribución de la corriente según ha asegurado la compañía ERDF, que gestiona la distribución de electricidad. "Hay cortes, pero como todos los días", ha declarado a Le Monde un portavoz de la empresa. Las protestas de los últimos días causaron sin embargo cortes en las ciudades de Nantes y Marsella. La CGT asegura que tres centrales eléctricas térmicas (en Cordemais, Gardanne y Porcheville) han suspendido su actividad.
Según la Unión Francesa de Industrias Petroleras (UFIP), de las ocho refinerías del país cuatro permanecen completamente paradas, dos funcionan de forma parcial y otras dos trabajan con normalidad. Después de que el Gobierno confirmara ayer que las reservas de carburantes del país se utilizan ya desde hace tres días, lo que el pasado fin de semana se consideraba un "último recurso", el presidente de UFIP, François Duseux, ha asegurado en una entrevista a Radio Classique que la situación es "mejor" que ayer, aunque los tanques del 30% de las gasolineras del país siguen agotados. En Córcega los dos depósitos de carburante de la isla han sido bloqueados a primera hora de la mañana por militantes de la CGT y huelguistas. Algunas gasolineras han debido cerrar también ante la falta de carburantes. El tráfico en las redes de ferrocarriles sigue afectado por la huelga de la compañía SNCF, que comenzó la pasada semana una huelga indefinida todos los miércoles y jueves. Cuatro de cada cinco trenes de larga distancia (TGV) funcionan correctamente, así como el 60% de los convoyes regionales. El tráfico en los cercanías que recorren la región de París es "prácticamente normal". Los ferroviarios hacen huelga este jueves también, con menor intensidad que en el pasado. Su protesta tiene que ver con la liberalización del sector que exige la UE y no con la reforma laboral aprobada por decreto, pero que ha sido suavizada en el trámite parlamentario.
El primer ministro Manuel Valls ha reiterado en BFMTV que “el Gobierno seguirá liberando las plantas bloqueadas (en jornadas anteriores fueron las refinerías y depósitos de petróleo). “No descartamos ninguna posibilidad para hacer cumplir la ley que y garantizar el derecho de suministro de los franceses”. Esto nos recuerda, evidentemente, la posibilidad de la militarización de los servicios que el Estado considera estratégicos para desmovilizar a los huelguistas. Valls repitió este jueves que el Ejecutivo “no cambiará la filosofía” de la ley, que prioriza los acuerdos dentro de las empresas en detrimento de los sectoriales. El proyecto facilitaba el despido en las empresas que justifiquen problemas económicos, pero este apartado ha sido modificado y nadie sabe cuál será su contenido final.
Un video sobre las protestas en Francia: http://valladolorenlosaudiosyvideos.blogspot.com.es/2016/06/video-sobre-lo-que-esta-ocurriendo-en.html
Manifestantes contra la reforma laboral en Francia han atacado este jueves una comisaría de policía en Burdeos y han roto los cristales de varias entidades bancarias en Nantes. 77 personas han sido detenidas en todo el país y según el ministerio del Interior unas150.000 personas se manifestaron en la que constituye la octava jornada de protesta por el nuevo proyecto de Ley del Trabajo del Gobierno Hollande que facilitará el despido.
En Burdeos unas cien personas lanzaron diversos objetos contra una comisaría de policía, causando destrozos en el edificio y daños en uno de los coches policiales. En Nantes causaron destrozos en las ventanas de varios bancos y los manifestantes se enfrentaron a la policía, que respondió con gases lacrimógenos. También se produjeron enfrentamientos en París.
En esta octava jornada sigue la amenaza de escasez de carburantes y de posibles cortes eléctricos, ahora que 16 de las 19 centrales nucleares del país se han sumado a la huelga. Controladores aéreos, ferrocarriles y puertos entre los sectores afectados por los paros.
Los sindicatos han convocado protestas y desfiles en París y otras ciudades del país y varios puertos han amanecido bloqueados por la acción de los manifestantes.
Refinerías y depósitos petroleros se encuentran en el epicentro de los movimientos de protesta desde hace varios días y algunos puentes, como el deTancarville o el de Normandia, cerca de Havre, permanecen cerrados esta mañana, con los consiguientes problemas circulatorios que eso genera.
El paro en las nucleares, que producen más del 75% de la electricidad del país, no ha tenido impacto en la distribución de la corriente según ha asegurado la compañía ERDF, que gestiona la distribución de electricidad. "Hay cortes, pero como todos los días", ha declarado a Le Monde un portavoz de la empresa. Las protestas de los últimos días causaron sin embargo cortes en las ciudades de Nantes y Marsella. La CGT asegura que tres centrales eléctricas térmicas (en Cordemais, Gardanne y Porcheville) han suspendido su actividad.
Según la Unión Francesa de Industrias Petroleras (UFIP), de las ocho refinerías del país cuatro permanecen completamente paradas, dos funcionan de forma parcial y otras dos trabajan con normalidad. Después de que el Gobierno confirmara ayer que las reservas de carburantes del país se utilizan ya desde hace tres días, lo que el pasado fin de semana se consideraba un "último recurso", el presidente de UFIP, François Duseux, ha asegurado en una entrevista a Radio Classique que la situación es "mejor" que ayer, aunque los tanques del 30% de las gasolineras del país siguen agotados. En Córcega los dos depósitos de carburante de la isla han sido bloqueados a primera hora de la mañana por militantes de la CGT y huelguistas. Algunas gasolineras han debido cerrar también ante la falta de carburantes. El tráfico en las redes de ferrocarriles sigue afectado por la huelga de la compañía SNCF, que comenzó la pasada semana una huelga indefinida todos los miércoles y jueves. Cuatro de cada cinco trenes de larga distancia (TGV) funcionan correctamente, así como el 60% de los convoyes regionales. El tráfico en los cercanías que recorren la región de París es "prácticamente normal". Los ferroviarios hacen huelga este jueves también, con menor intensidad que en el pasado. Su protesta tiene que ver con la liberalización del sector que exige la UE y no con la reforma laboral aprobada por decreto, pero que ha sido suavizada en el trámite parlamentario.
El primer ministro Manuel Valls ha reiterado en BFMTV que “el Gobierno seguirá liberando las plantas bloqueadas (en jornadas anteriores fueron las refinerías y depósitos de petróleo). “No descartamos ninguna posibilidad para hacer cumplir la ley que y garantizar el derecho de suministro de los franceses”. Esto nos recuerda, evidentemente, la posibilidad de la militarización de los servicios que el Estado considera estratégicos para desmovilizar a los huelguistas. Valls repitió este jueves que el Ejecutivo “no cambiará la filosofía” de la ley, que prioriza los acuerdos dentro de las empresas en detrimento de los sectoriales. El proyecto facilitaba el despido en las empresas que justifiquen problemas económicos, pero este apartado ha sido modificado y nadie sabe cuál será su contenido final.
Un video sobre las protestas en Francia: http://valladolorenlosaudiosyvideos.blogspot.com.es/2016/06/video-sobre-lo-que-esta-ocurriendo-en.html