[Venezuela] Circo parlamentario y miseria material para la clase obrera

 

CIRCO PARLAMENTARIO Y MISERIA MATERIAL PARA LA CLASE OBRERA EN VENEZUELA

¡GOBIERNO Y OPOSICIÓN LA MISMA EXPLOTACIÓN!

 

 

El verdadero fraude es la farsa electoral, la ilusión parlamentaria misma

El pasado 28 de julio de 2024 se realizaron las elecciones presidenciales en Venezuela. El oficialismo se proclamó a sí mismo ganador de dichas elecciones, cosa que luego ha ratificado el CNE. ¿Fraude y pasteleo? Lo puede hacer porque es el Partido del Ejército y controla los cuerpos oficiales y extraoficiales de la represión.

Lo que de verdad determina quién gana las elecciones en Venezuela es quien tenga el apoyo de las Fuerzas Armadas, del Ejército, que por el momento no piensa desprenderse de su proyección parlamentaria que le ha servido en los últimos tiempos. Pero, compañeros, lo que tenemos que ENTENDER es que la DEMOCRACIA PARLAMENTARIA es un profundo FRAUDE por definición, es un fraude por el cual se hace elegir a los explotados qué grupo de explotadores va a dominar en los siguientes seis años.

Oficialismo y “oposición” se pelean en última instancia para ver qué camarilla desvalija el fruto de la explotación del proletariado venezolano y de la renta petrolera. Pero hay algo más profundo que une a oficialismo y “oposición”: ambas fracciones burguesas necesitan la ILUSIÓN y el ESTUPEFACIENTE PARLAMENTARIO.

 

Circo parlamentario y control social

¿Qué hay detrás de las llamadas a las manifestaciones pacíficas por parte de oficialismo y “oposición”? Por paradójico que pueda parecer, la realidad es que ni el oficialismo ni la propia “oposición” pueden permitirse que la llamada “oposición” gane estas elecciones. Si dejaran que ganara la “oposición”, el programa económico y social que tendría que desplegar para recuperar la economía capitalista sería tan anti-obrero o más que la actual política económica y social del oficialismo. El capitalismo venezolano se habría quedado sin el señuelo, la zanahoria, la ILUSIÓN con la que narcotiza a la clase obrera. El capitalismo venezolano se quedaría sin el seguro de vida de la ILUSIÓN parlamentaria y se arriesgaría a una SITUACIÓN SOCIAL EXPLOSIVA. ¿Con qué mantendrían el ENGAÑO a las masas obreras explotadas? ¿Con qué ILUSIÓN mantendrían la PAZ SOCIAL y la SEDACIÓN con la que controlan a la clase obrera? ¿Qué alternativa le quedaría a la clase obrera después de que quedase palmariamente demostrado en los hechos que oficialismo y “oposición” son la misma explotación?

Sólo nos quedaría la alternativa de ENTENDER y APRENDER que mande quien mande, la economía capitalista venezolana exige el sacrificio de la clase obrera, su explotación redoblada y que sólo si recuperamos los métodos de la lucha de clase, a través de la recuperación del sindicalismo de clase y de la lucha por el abatimiento del poder burgués, podremos acabar con la situación de MISERIA a la que nos condena el CAPITALISMO.

Éste es el motivo por el que la propia “oposición” se encarga de frenar la protesta y controlar la situación. Se trata de mantener la ILUSIÓN, de enredar a la clase obrera prometiéndole que el día que les permitan hacer elecciones “de verdad” todo se arreglará.

Así, la reacción de quienes se habían ilusionado y han visto cómo se esfumaban sus ilusiones, se ha quedado en una indignación parlamentaria, de menor intensidad de lo que se ha querido hacer ver: muchos de los vídeos que han circulado se refieren a situaciones de hace años, durante las guarimbas. Lo cual no quita que el Estado capitalista venezolano ha desplegado una represión selectiva pero sistemática: detenciones, allanamientos de casas, requisa de celulares, etc.

 

La situación del capitalismo venezolano

Lo que está sucediendo en Venezuela, es que los ilusos bisnietos de Bolívar abandonaron todo el parque industrial, se dedicaron a la exportación de capitales y petróleo; los altos precios del petróleo facilitaron los créditos y se endeudaron hasta los tuétanos, promovieron la liquidación de su propia industria vendiendo petróleo a cambio de productos manufacturados que luego han inundado el mercado venezolano destruyendo primero su propia industria y agricultura y produciendo luego una inflación desbocada, sumiendo a las masas proletarias a una miseria sin precedente.

En estos 25 años de gobierno el Ejército bolivariano, el Partido más centralizado de la burguesía venezolana, ha desarrollado una política de represión y sometimiento de la clase obrera con la incorporación de grupos de delincuencia organizada denominados “colectivos”, con los que controlan las manifestaciones desde los barrios hasta las fábricas. En los barrios proletarios controlan al proletariado, con la incorporación del lumpenproletariado distribuyendo la bolsa del CLAP y el gas doméstico, imponiendo normas de convivencia semejantes a las cárceles, y el gobierno llama a éstas, “zonas de paz”, donde ya no hay necesidad de la policía porque están controladas por la delincuencia, garantizando lo que llaman la paz social. Además de esto, en estos 25 años el gobierno ha mitigado el descontento y la lucha proletaria con un uso intensivo de la ILUSIÓN PARLAMENTARIA, desde que llegaron al gobierno han realizado 23 elecciones parlamentarias, sumando la actual.

El oficialismo y la “oposición” han logrado con la campaña electoral desmovilizar al proletariado, han paralizado su energía, su instinto de clase. El Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS) registró 1.243 protestas durante el primer trimestre de 2024, equivalente a 14 manifestaciones diarias en promedio. Esta cifra representa una disminución del 56% en comparación con el mismo período del año pasado.

 

Miseria material para la clase obrera

En franco deterioro están en todo el país de los servicios públicos: se han extendido los cortes eléctricos hasta por 5 horas a diario y se ha restringido el servicio de agua potable. En cuanto al salario, en marzo 2024 se cumple dos años del último aumento de salario mínimo base permaneciendo congelado en 130Bs (3,55$ según BCV, y 3,11$ según dólar paralelo, con el cambio actual). En julio 2024, el gobierno anunció aumento del llamado salario integral, incrementando el monto de los llamados bonos de guerra (pagados en Bs, indexados al dólar del BCV). A los pensionados se les aumentó a 45$ (1.640Bs). A los empleados públicos el pago de bono de guerra es de 90$ del BCV, los 40$ cesta ticket, el salario por nómina queda congelado.  Se ha bonificado el salario, estos “bonos de guerra” no tienen incidencia en pago de prestaciones, ni vacaciones, ni aguinaldos, (cumpliendo con los compromisos con Fedecámaras de ir eliminando las prestaciones). Y, mientras la canasta alimentaria en marzo 2024 alcanza los 554,26$, la canasta básica en Venezuela (que además de gastos de alimentación incluye otros rubros como educación, salud, transporte y servicios), alcanzó un costo de 1.200$ para una familia de cinco miembros, según el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación de Maestros (Cendas-FVM, 09-05-2024). La burguesía venezolana nos paga parte del salario o todo el salario en bolívares cuando toda la economía está dolarizada.

Esta situación de crisis siempre empujará a la clase desposeída, al proletariado, a rebelarse, a la lucha por el pan, por la comida. Pero en ausencia de una red de lucha sindical fuera del control del Estado y en ausencia de la influencia del Partido Comunista Internacional, esta rebelión se consumirá en sí misma o será encauzada por cada fracción de la burguesía que enrolará a una parte de los asalariados para que luche por los intereses de dicha fracción, prometiéndole falsamente la solución de todos sus problemas con su triunfo electoral.

 

La gran mentira del socialismo en Venezuela

La gran victoria de la burguesía venezolana – tanto del oficialismo como de la “oposición” – ha sido conseguir identificar al Partido del Ejército con el socialismo y el comunismo. Es una necesidad imperiosa para la clase obrera eliminar esta GRAN MENTIRA. En Venezuela no hay socialismo, hay CAPITALISMO. El capitalismo se basa en el trabajo asalariado, en que nuestra fuerza de trabajo es una mercancía más y tiene un precio: el salario. Por esto el capitalismo significa inevitablemente explotación y hambre para la clase obrera. Ningún cambio de gobierno parlamentario va a significar un cambio real para la clase obrera en el capitalismo. El Estado capitalista está al servicio del capital, mande quien mande, gobierne quien gobierne.

La ilusión parlamentaria solo sirve para distraernos mientras nos matan de hambre o a balazos: los gobiernos parlamentarios pasan y el hambre queda. Los proletarios seguiremos sufriendo las consecuencias de este sistema mientras nos enreden en que hay que cambiar de gobierno cuando lo que hay que hacer es abolir este sistema de explotación.

Ésta es la realidad que vive y enfrenta la clase obrera y el proletariado venezolano, desarmado teóricamente sin un organismo clasista que le sirva como instrumento para la lucha por mejores condiciones de trabajo y salarios. La clase obrera no podrá luchar ni siquiera por sus reivindicaciones inmediatas si no rompemos con la política burguesa que influencia y dirige todo el aparato sindical, rompiendo con su control organizativo, tendiendo a formar organismos de lucha económica de clase e independientes de los partidos políticos parlamentarios, combatiendo la política de sumisión o de solidaridad a la economía nacional o de empresa, combatiendo y desenmascarando al régimen democrático parlamentario como instrumento clásico de dominación de la dictadura del capital.

Necesitamos recuperar un programa de superación revolucionaria del capitalismo, sólo así podremos luchar por mejores condiciones laborales y sociales al mismo tiempo que preparamos las condiciones para la abolición de la esclavitud del trabajo asalariado.

 

 

¡ABAJO EL FALSO “SOCIALISMO” DEL PARTIDO DEL EJÉRCITO!

¡ABAJO EL CAPITALISMO EXPLOTADOR QUE HAMBREA A LA CLASE OBRERA!

¡POR LA REANUDACIÓN DE LA LUCHA DE CLASE! ¡POR LA ABOLICIÓN DEL TRABAJO ASALARIADO!

 

             PARTIDO COMUNISTA INTERNACIONAL – www.pcielcomunista.org

 

4 de agosto de 2024